Elena Santa Cruz, haciendo visible lo invisible

7º Congreso Provincial de Alfabetización, Literatura y Educación Integral

Elena Santa Cruz, haciendo visible lo invisible


El viernes, 13 de octubre, se llevó a cabo el 7º Congreso Provincial de Alfabetización, Literatura y Educación Integral. El encuentro tuvo como finalidad generar un espacio de intercambio, reflexión crítica y propuestas innovadoras en torno a la alfabetización como práctica educativa, social y cultural, compartiendo investigaciones, estrategias y experiencias entre los diversos actores implicados en el proceso educativo.

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En el marco del Congreso de Alfabetización Elena Santa Cruz visitó Lavalle. “Dueña” de más de 500 títeres, docente y titiritera; así se presenta, aunque tiene un amplio currículum en el que se menciona también que fue Embajadora de la Paz 2010; pero sobre todo es una mensajera de esperanza que, con sus muñecos, recorre en forma voluntaria hospitales, penales y dicta charlas destinadas a docentes, padres, niños y público en general.

Elena Santa Cruz llegó a Lavalle con su maleta cargada de títeres. Nos conmovió con “Impuesto”, una madura docente conductista, que fue la encargada de entregarle el reconocimiento al Prof. Daniel Pietro Castillo. Y nos hizo reflexionar con “Melanco”, un entrañable y tierno cachorro que con su escasa edad es capaz de brindarnos las enseñanzas más profundas.

Su charla tuvo como objetivo primordial humanizar la tarea docente. Mirar el rol docente desde una mirada más humana, en donde el docente no sólo enseña sino que se brinda, y desnuda su corazón.

“Un buen docente tiene ojos bien grandes y bien abiertos para poder ver a todos y a todas, es aquel que se brinda en cuerpo y alma dando lo mejor de sí para poder formar buenas personas. Para eso cada docente brinda todo su amor y su formación, pone su empeño cada día para poder lograr en los niños el aprendizaje, así como también se permite aprender día a día de su práctica docente.”

En su diálogo con estudiantes de la Tecnicatura Superior en Comunicación Social contó sobre su tarea en la vida: “a lo largo de todos estos años fui estudiando varias carreras porque mi deseo desde muy chiquita era ser titiritera y docente y sobre todo poder trabajar con personas en situaciones de vulnerabilidad, que tal vez no pudieran acceder a cuestiones que tuvieran que ver con el arte y la educación.” Su mensaje siempre es humanizante y esperanzador, con una mirada de todo lo que podemos hacer de bueno en la vida.

Y  agregó que todos sus trabajos intentan lograr que el otro, en el caso de un penal, puedan pensar que son capaces de hacer cosas buenas, y en los hospitales, de que recuperen la alegría y las ganas de luchar y ofrecer ese bálsamo que es la risa; y continuó: “voy buscando en cada lugar que es lo que falta y tratando humildemente, con mis muñecos, de llevar un rato, de ese negativo fotográfico de lo que veo que necesitan en el lugar.”

Recordó que el títere, el muñeco, viene desde el tiempo de las cavernas, la pelota, la muñeca y los dados, son los objetos más antiguos que se han hallado; y asegura que el muñeco es como una llave al mundo infantil, en los niños, y en los adultos a su infancia, a lo que alguna vez, fue un período, si se pudo, placentero.

Los títeres de Elena han nacido para alguien, para  decir algo, cada uno tiene su personalidad, su voz, su nombre y son invariables, es decir no se modifican cada uno representará su papel para siempre. Con sus títeres Elena hace carne el paradigma de que la mejor educación no es la que se hace de cabeza a cabeza; sino la que se hace de corazón a corazón.

Nota realizada por alumnas de primer año de la Tecnicatura Superior en Comunicación Social.

1 comentario en «Elena Santa Cruz, haciendo visible lo invisible»

  1. Excelente, fantastico!! quiero tenerla en un programa de fortalecimiento las entidades bibliotecarias y fomentacion de la lectura en San Rafael Mendoza.

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